Siendo el año 2008, todavía me sorprendo cada vez que escucho a alguien repetir la archiconocida frase: "me han dicho que el camote es bueno para el pelo de mi perro"
(y quién te lo dijo, acaso algún doctor?? Por supuesto que no!!), No sé cuándo, ni cómo, ni de dónde salió este creencia -muy peruana por cierto- que no distingue clases sociales.
Pero vayamos por partes. Lamento desilusionar a muchos, pero ... pese a quien le pese, el perro es y seguirá siendo ... CARNÍVORO. Si no me crees, ábrele la boca a tu perro y observa esos hermosos caninos e incisivos diseñados para matar a la presa y desgarrar la carne; observa sus muelas que, al cerrar la boca, funcionan como perfectas tijeras; su intestino es relativamente corto (comparado con el de los primates -humanos incluídos-) y diseñado para eliminar los deshechos en el menor tiempo posible. Su estómago y sus jugos gástricos están hechos para digerir la proteína y grasa animal con asombrosa eficiencia; etc, etc, etc...
Ok, pero no faltará alguien que me dirá: mentira, mi perro come de todo: desde tallarín verde hasta choclito y está bien gordito... por supuesto, por supuesto...
Lo que ocurre es que hemos convertido al perro en un omnívoro obligado: si un animal (ser humano incluído) no tiene otra opción que comer piedras pues las comerá, no hay vuelta que darle, aquí entra a funcionar el instinto de supervivencia.
Estimado lector, te pido que me acompañes nada más que con tu sentido común, veamos: bueno para su pelo significa pelo de buen color, de apariencia saludable, manto uniforme y con brillo, y con poca pérdida del mismo. Pero saben ustedes qué compuestos de la dieta del perro producen todo esto?? Claro que lo saben: la PROTEÍNA y la GRASA animal. Y también saben de qué está hecho el camote, cierto? Exacto, está hecho de A-Z-Ú-C-A-R, es un almacén de azúcar: cero proteínas y cero grasas de interés para nuestros perros.
Ojo, el organismo canino NO está diseñado para recibir una sobrecarga de azúcar. Por ese motivo los perros camoteros defecan en gran cantidad y de escasa consistencia. Entre otras "perlas" que el camote puede provocar en nuestros perros tenemos:
- flatulencia (pedos)
- defecación frecuente
- diarreas intermitentes
- mala digestión
- alcalinización de la orina (lo que predispone a cistitis, lo que conlleva a infecciones urinarias.
Los carnívoros deben tener una orina ácida, que es lo opuesto a alcalina)
- pelo opaco y quebradizo
- agotamiento del páncreas (lo que predispone a diabetes)
- mal aliento (halitosis)
- retraso del crecimiento en cachorros
- agotamiento de vitaminas del complejo B.
Lo peor de todo, hay empresas que con instinto marketero asombroso han aprovechado la "cultura camotera" peruana y están vendiendo alimentos comerciales para perro con su "toque de camote". Ahora ustedes ya saben. Antes de comprar lean las etiquetas, consulten con sus veterinarios. O si finalmente deciden darle a su can alimento preparado en casa, que sea hecho a partir de vísceras y carne.
Tu perro y yo te lo agradeceremos.
...y Dios hizo al perro carnívoro y le dijo: "de hoy en adelante tú vas a comer camote" PLOP!
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